Algo más que urgencias médicas: por qué ver Doc, la remake hollywoodense de la serie italiana

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Un protagonista que despierta con amnesia debe ser uno de los recursos más trillados de la ficción. Si a eso se suma el género drama médico, uno pensaría que estamos ante el reino del cliché. Pero Doc, la serie que emite Disney+, tiene algunos grises que arrastran a la maratón ocular.

Aquí nuestra heroína manda a la «papelera» mental sólo algunos años de su vida. Y cuando despierta en el hospital se siente en casa porque es médica en esa misma sala. Abraza a su marido con ternura, sin recordar que… ya no es su marido. Tampoco tiene presente una gran tragedia, por lo que deberá volver a elaborar un viejo duelo mientras intenta recuperar su profesión.

De suero, resucitaciones, recuerdos, olvidos y urgencias se trata este cuento que tuvo una realización original suceso en Italia (Nelle tue mani, rebautizada Doc en Latinoamérica y emitida por Sony). En 2025 llega al streaming reconvertida y con maquillaje hollywoodense.

La historia italiana estaba inspirada en un caso real (el del doctor Pierdante Piccioni) registrado en el libro Doce menos. Andrea Fanti (Luca Argentero), el protagonista, es médico y no recuerda sus últimos 12 años. En esta ocasión, la remake tiene claras diferencias. Ya no transcurre en Milán, sino en Minnesota y hace foco en una médica, Molly Parker (Amy Elias), quien borra menos tiempo de su «casete mental», ocho años, tras una lesión cerebral producida en un accidente automovilístico.

Todo empieza con un choque, un vidrio astillado y una accidentada, Amy, que entra a un tubo para someterse a un estudio. ¿Quién es el presidente de la Nación?, le preguntan. La confundida víctima responde que Estados Unidos está gobernado por Barack Obama. Hay un lapso que, evidentemente, se evaporó de su registro… Tal vez la amnesia resulte una bendición que le quite el peor de los lastres.

Si bien medios como The Hollywood Reporter o USA Today «asesinaron» al producto por «su ritmo pobre y falta de audacia plagada de clichés médicos», otros poderosos como Variety la ensalzaron por «su tono mesurado y diálogos y personajes que brillan».

Doc divide las aguas: de un lado de la orilla, captura a los fans de los dramas médicos con sus lugares comunes. Por otro, repele a los que creen que en ese género ya se ha narrado todo y no queda demasiado por explorar. ¿Qué podría asombrar a alguien que ya se zambulló en E.R, Grey’s Anatomy, House, Chicago Hope, New Amsterdam y otra decena de historias?

Amy y su ex marido… ella, con amnesia, no recuerda que está divorciada.

Si uno no tiene pretensiones de serie disruptiva y entiende al producto como lo que es, pochoclo para amenizar el fin de semana, sigue hasta el final como si estuviera viendo una telenovela (con menos trazo grueso, claro, pero mucha obviedad).

Sólida en su rol, Parker, la actriz canadiense de 52 años y participaciones en series como Six Feet Under y House of Cards, trae reminiscencias de Ellen Pompeo en Grey’s Anatomy. En la vida real atravesó un cáncer, por lo que parte de su «viaje» en este drama asegura que tiene inspiración en viejas sensaciones personales.

A medida que los capítulos avanzan (diez, de 45 minutos cada uno), entendemos a Amy como una estereotipada médica tan insensible con sus pacientes como brillante. Ese agujero negro que representa su amnesia parece transformarla en dos mujeres: la amnésica, más piadosa y empática, y la anterior, su peor versión.

Ese rasgo «infantil» del guión, el de dividir a ese personaje en dos criaturas tan marcadas, nos lleva todo el tiempo a preguntarnos: ¿Cuánto puede durarle esa nueva ternura si los recuerdos reaparecen? ¿Cuánto tardaría en volver a ser el monstruo enojado que muestran constantemente los flashbacks si su memoria vuelve a la «normalidad»?

Molly Parker, protagonista de «Doc».

Entre las infinitas posibles divisiones que pueden hacerse de una serie, es válido simplificar el asunto en dos: olvidables y memorables. En una era de producción frenética e imposible de deglutir en su totalidad, la primera clase no necesariamente implica un producto «malo». Una historia puede cumplir su misión y apagarse fácilmente apenas llegan los títulos finales. En ese grupo entra Doc. Play, maratón y adiós. Sin culpa.

Ficha

Calificación: Buena

Drama médico Protagonistas: Molly Parker, Omar Mettwally, Jon-Michael Ecker Dirección: Barbie Kligman. Emisión: Diez capítulos por Disney+.

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