Las big tech buscan mano de obra barata en naciones subdesarrolladas para las tareas monótonas y repetitivas. Salarios de miseria por actividades que, en muchos casos, dañan la salud mental. El caso de resistencia en Kenia, lo que podría pasar en Argentina.
El lado oscuro de la IA: cómo trabajan y cuánto cobran quienes sostienen la revolución
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