A diferencia de los pájaros, que a menudo vuelan por entornos desconocidos y llenos de obstáculos con notable velocidad y sin chocar, los drones suelen depender mucho de un guiado externo o de rutas predefinidas para volar con rapidez; de lo contrario, su vuelo se vuelve tremendamente lento
A diferencia de los pájaros, que a menudo vuelan por entornos desconocidos y llenos de obstáculos con notable velocidad y sin chocar, los drones suelen depender mucho de un guiado externo o de rutas predefinidas para volar con rapidez; de lo contrario, su vuelo se vuelve tremendamente lento. Sin embargo, un reciente y revolucionario avance tecnológico ha permitido que los drones, incluyendo los de menor tamaño, emulen las capacidades de vuelo de las aves con mayor fidelidad que lo conseguido en cualquier intento anterior.
Este avance es obra de un equipo integrado, entre otros, por Fu Zhang y Yunfan Ren, de la Universidad de Hong Kong en China.
Zhang, Ren y sus colegas han equipado con esta capacidad a un nuevo dron, llamado SUPER (un acrónimo derivado de “Safety-assured high-speed aerial robot”).
SUPER es capaz de volar a velocidades superiores a 20 metros por segundo y evitar la colisión con obstáculos tan pequeños y difíciles de detectar como de hasta 2,5 milímetros de grosor, el caso de algunos cables eléctricos y de ramas muy finas. Para conseguirlo, utiliza únicamente sensores instalados a bordo y la potencia de cálculo que le ofrece el hardware instalado también a bordo. No depende, por tanto, de ayuda externa. Pese a todo su equipamiento extra, SUPER tiene un peso al despegar de tan solo 1 kilogramo y medio.
En las pruebas realizadas hasta ahora, SUPER ha demostrado una destreza excepcional, volando por bosques frondosos en plena noche sin chocar con ramas y esquivando hábilmente cables delgados.
Todo apunta, tal como argumenta Zhang, a que este avance tecnológico marcará un antes y un después en la evolución de los drones.
Con el nuevo sistema, los drones pueden volar a alta velocidad a través de espacios con numerosos obstáculos y manteniendo un nivel de seguridad inalcanzable con otros diseños. «Es como dotar al dron de los reflejos de un pájaro», afirma Zhang.
La innovación tecnológica reside sobre todo en la sofisticada integración de hardware y software. SUPER utiliza un sistema sensor láser 3D del tipo LiDAR, capaz de detectar obstáculos a una distancia de hasta 70 metros con una precisión milimétrica. Esto se complementa con un avanzado software de planificación de trayectoria de vuelo.
El equipo de Zhang y Ren expone los detalles técnicos de su innovación en la revista académica Science Robotics, bajo el título “Safety-assured high-speed navigation for MAVs”. (Fuente: NCYT de Amazings)