Un oficial de policía de 21 años, oriundo de Coronda, fue acusado de disparar contra su ex pareja, también agente policial, quien se encontraba embarazada de ocho meses. La Justicia santafesina lo imputó por tentativa de homicidio triplemente calificado por el vínculo de pareja, por tratarse de violencia de género (femicidio) y por el uso de arma de fuego. Además, se lo acusa de tentativa de aborto, dado el avanzado estado de gestación de la víctima.
El fiscal Alejandro Benítez explicó que la imputación se concretó tras tomarle declaración a la mujer, quien recientemente salió de terapia intensiva y se recupera en una sala común. Según su testimonio, existía un historial de violencia por parte del acusado, incluyendo episodios de celos, control, agresiones físicas y amenazas con arma de fuego previas al ataque.
Aunque no mantenían una relación formal al momento del hecho, habían reanudado contacto ese mismo día o el anterior. La bebé, nacida por cesárea de emergencia, sería hija del imputado. El fiscal descartó la hipótesis de un disparo accidental tras recabar evidencias y testimonios.
Las autoridades judiciales analizan ahora decretar la prisión preventiva del acusado, mientras profundizan en los antecedentes de violencia de género. Además, se evalúan medidas de protección para la mujer y su hija recién nacida.