Se esfumó como arena entre los dedos. Ese amor que se profesaban, y que nació en un contexto muy controversial por la vigencia de un matrimonio con otro polista, Zaira Nara y Facundo Pieres se disolvió y llegó a su fecha de caducidad. Los famosos decidieron separarse y se activó un universo de repercusiones.
Los rumores se filtraron en los últimos días y luego de esas presunciones primarias se produjo una serie de averiguaciones, que arrojaron como resultado hasta los factores que incidieron para que la hermana de Wanda Nara y el deportista eligieran caminar por senderos distintos en la vida.
En esa búsqueda, en Intrusos intentaron encontrar los factores y así Paula Varela expuso las averiguaciones que logró recopilar y exteriorizó: “Me contaron que él estaba más enganchado que ella y que le pedía más compañía y ella no quería tanto”.
Así la panelista iluminó una interna tremenda que refiere a todos los escándalos que salpican a Wanda Nara y sostuvo: “Está hinchado un poco las bolas de los quilombos de la familia de Zaira”. Y eso derivó en un dato sumamente polémico, que refiere a una definición hiriente que le prodigaban a la modelo.
EL DESPECTIVO APODO DE ZAIRA NARA
Resulta que Adrián Pallares confirmó el apodo controversial, y con una connotación increíblemente ofensiva que le destinaron a Zaira en el seno del clan Pieres: “Anoche, Tartu dijo que la familia de Pieres le decía a Zaira Nara ‘la bataclana’”.
Para comprender el tenor de ese apócope, la Real Academia Española define a bataclana como bailarina de espectáculo teatral frívolo y en otra acepción directamente sostiene como ‘prostituta’.